Archive for agosto 2012

Productividad al mango


Escrito por Antares bajo , , ,

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Esta semana vino con muchos cambios.
El principal es que me puse a hacer ejercício. Así de la nada, una noche que el Maridón se me fue a jugar al póquer se me dio por desempolvar mi vieja Wii Fit.
Así las cosas me puse el objetivo de hacer media horita de ejercicio todos los días, y lo vengo manteniendo. :)

Y la verdad es que debería darme vergüenza decirlo, pero todavía me sorprendo con lo poco que hace falta ejercitar para -por ejemplo- no tener dolores. A los dos días de empezar ya se me habían ido la mayoría... Reemplazados obviamente con esos otros dolorcetes que causa el uso de músculos que una no sabe ni que tiene. Pero bueno, es de esos casos en que "no hay mal que por bien no venga". Al menos en esta semanita ya bajé como un kilo entero. ¡Yay!

Así todo, el día de hoy viene super productivo:
- Me levanté temprano para mandar al niño a la escuela.
- Hice ejercicio.
- Saqué la ropa seca del balcón.
- Lavé otra tanta (con las cortinas) y la tendí.
- Limpié el cuarto del heredero.
- Limpié mi cuarto.

¡...Y no son ni las 4 de la tarde!
Así las cosas me falta poco para terminar las últimas piecitas de Ai Candies para mandar la semana que viene. Bah, me falta empezar TODO un sombrerito... pero calculo poder hacerlo rápido durante el finde.

Así que los dejo con un pequeño picdump:




Este es un paquete que le mandé a mi amiga Rokko, que vive en Japón. El año pasado me había mandado ella uno y ya que no se vino para estos pagos, la dulzura hubo que mandársela por correo.
También le mandé uno a doña Sisti en España, que cumple años tudei. Ni de casualidad va a llegarle a tiempo, pero al menos el hecho de que esté sin acceso a internet me ayuda a que sea sorpresa. Tardía, pero sorpresa al fin.




Este es un paquete de porcelana que adquiri la semana pasada, pero al abrirlo me encontré que estaba todo chopodri. Y no, ni mi enfermiza atracción por los cultivos bacteriológicos me impidió ir a la librería a cambiarlo.



El domingo de madrugada, que me picó el bicho WiiFit-eril.




Varios accesorios de chupetines y un bocetín perdido en la hoja de trabajo. Todavía no me explico qué extrañas conexiones tienen mis clientes, que se las arreglan para pedir los mismos ítems, los mismos días. El mundo de las artesanías está lleno de misterios.




El otro día estaba yo leyendo blogs por ahí y alguien comentó cuánto le gustaban los hogares. Curioso como a veces hace falta que alguien comente su anhelo por algo para que uno caiga en sí que lo tiene. Pero bueno, le daría a esa persona mi hogar. ...Si es que no lo necesitara. O fuera remotamente posible.
Por lo pronto no termino de entender tanto gusto.
Será que de puro friolenta realmente no me basta. :P

Amigotchis


Escrito por Antares bajo

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Bam-bam tiene un amiguito en el Jardín. Según lo que me han dicho, Sebastián (el amiguito en cuestión) es bastante parecido a mi heredero: es tranquilo, se porta bien, es algo callado... Y según sé, se llevan muy bien.

Hoy a la entrada del colegio una mamá me preguntó cual era el nombre de mi hijo, y le conté. Me dijo que era la mamá de Sebastián e inmediatamente quise saber un poquito más de ellos. Me morí de orgullo que me contara de lo dulce y bueno que le pareció mi niño y la verdad es que me hubiera gustado conocer más al suyo: Estoy segura que mi opinión habría de ser similar.


Así me dejó la señora. Así.

En los 50 metros que hay entre el cole y mi casa reiteró puros elogios e intercambiamos intenciones de que los enanos alguna vuelta se junten a jugar después del cole. Antes de despedirme le pregunté como se llamaba, y casi me caigo de traste cuando respondió... con mi nombre.

Cabe aquí hacer el paréntesis de que no tengo un nombre común. Seh, soy de esas que de muy chica tuvo que resignarse con que JAMÁS iba a tener una taza o llavero con su nombre. Ni hablar de siquiera pensar en la posibilidad de tener mi propia tocaya...

Así que a pesar de pronunciar nuestros nombres un apenitas diferente, con la mamá de Sebas nos reímos mucho.

Todo se explica. ;D

Fruncido


Escrito por Antares bajo ,

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...Pero nada relacionado con la costura...

Ayer fue uno de aquellos días de como 30 horas. Por muchas razones (siendo una de ellas mi propia estupidez, pero bueh). Paso a relatar.

Como toda la semana, me levanto temprano para mandar al niño a la escuela. Como Don Marido tenía un trámite que hacer, lo llevé yo. No biggie.
Al rato de volver de la escuela, vuelve también Don Marido... con el gato de los vecinos en brazos. Al parecer lo había encontrado en la calle, casi en medio de la avenida.

Esta vuelta el gato no se quedó tan pancho como de costumbre. Al principio me pareció que le molestaba el ruido del calefón, pero al rato me di cuenta que en realidad la ansiedad se la causó el hecho de que Don Mario entrara a bañarse. Cosas de gatas...





Más o menos a la hora salimos, y aprovechamos para tratar de meter al minino por la ventana que da a la calle. Por suerte tocamos timbre antes, y esta vuelta había quien atendiera. Problema resuelto.

Al mediodía fui a buscar al crío al cole y pronto me enteré que andaba con dolores de panza, de lo cual ya se había quejado el día anterior.
Es algo muy cómodo -para mí- que tiene Bam-bam. Con tanto revoltijo que ha sabido hacer con respecto al sueño, es tan simple verlo dormir fuera de hora (léase: cualquier momento que no sea la noche) para saber que no está bien.
Así las cosas, ayer hizo una siesta de 3 horas y media, y al levantarse seguía con dolor. Así estuvo varias horas más, hasta que dije basta y decidí que había que ir a la guardia.

Llamé a Don Marido para que se escapara del trabajo y nos llevara. En el medio se me dio por darle un baño al niño, a ver si se me relajaba un poco. Esto funcionó mejor de lo esperado ya que se le relajó la pancita y lo que le jorobaba pudo "pasar" (por no ser demasiado explícita). Y zafamos de ir a la guardia, yay.

En medio de todo esto recibí un mensaje de mi amigote Lalalo, quien me pidió si podía desbloquearle un celular mañana, que viene a visitarnos. Durante la siesta del heredero me había puesto a bajar aplicaciones y otras cosas necesarias, así que ya a la noche y toda embalada se me dio por toquetear el celular de Don Marido, que hace tiempo venía mal.

Digo "venía mal" porque Android es bueno, pero algunos ROMs no son demasiado estables, otros se van rompiendo con el tiempo y otros -posiblemente los mejores- necesitan algo de mantenimiento. Ni bien lo compró (en Claro) el celu de Don Marido estaba flamante: andaba rápido, nunca un cuelgue... Pero ya hace un tiempo perdió la capacidad de actualizar las apps y en ciertos lugares el teléfono simplemente se taraba.
Al tratarse de un procedimiento tan simple que es rayano a lo estúpido, decidí rootearle el fono. Hecho esto, tuve los permisos para sacarle el bloatware, que bastante memoria le usaba.
¿El problema? O terminé de romper el ROM o borré algo que no debía y maté la aplicación com.android.phone, que no solo tira un cartel insoportable incesantemente, sino que te deja con un teléfono... sin teléfono.
Probé con mil soluciones y cuando nada sirvió... hubo que hacerle un factory reset, lo que ameritó importante backup. El tema es que esto tampoco funcionó ya que el fono no tenía ni recovery... Así que me arremangué toda y me dediqué a flashearlo de punta a punta.
Al menos ahora las cosas son fáciles y un montón de flasheos se pueden hacer tan fácilmente como instalando aplicaciones, como en este caso con ClockworkMod. recuerdo cuando flasheé mi Spica hace menos de dos años, que tuve que instalar programas, drivers, seguir interminables guías y rezarle al Odin... ¡Ahora es un chiste!

Las cuestiones más complicadas -o más bien: hinchapelotas- del proceso fueron hacer los backups (y olvidarse de algunos), pasar archivos y por último, elegir el ROM nuevo. Con todas las cosas que les ponen y les sacan, hay que leer mucho para comprobar que sean estables y ande todo lo que tiene que andar. Ni hablar la oferta de ROMs que hay en las interwebs... Después me preguntan por qué odio los productos con iOS. Preciosa interface, pero para mí no hay nada como el software libre y la posibilidad de cocinar un ROM a tu medida. Ni hablar de sacarle el jugo a equipos viejos, pero principalmente: baratos.
Por ejemplo mi lindo Spica, que es un teléfono de dos mangos: Si no tengo un ROM nuevo es porque el actual es super estable. Creo que hace como un año que no cambio de ROM, y si no anda como el primer día, es solo cuestión de limpiar un poco.

Así que me quedé hasta casi las 4 de la mañana, pero el fono quedó flamante.

¿Miau?


Escrito por Antares bajo , ,

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¿Cuánto tiempo sin escribir, no? ¡Juro que es por buen motivo! Ahí lo esplico.

 Pues bien, sucede que hace varias semanas (énfasis en "varias") estoy de limpieza pre-primaveral. ¿Qué le voy a hacer? Es super molesto, pero la cantidad de porquerías que se acumulan suelen ser proporcionales al tamaño de la casa. Y mi casa se puede considerar grande.

 Así las cosas, la limpieza jamás paró desde mi último post. Lo más interesante de todo fue haber "recobrado" el cuartito del fondo, que estaba lleno de porquerías. Me resulta muy loco haberme mudado a finales de 2009 y recién ahora "plantar la bandera" en el cuartito. En términos de que en estos dos años y medio jamás había realmente limpiado el bañito o la ventana. Total, no se usaba para nada...

Ayer nos tocó ir a Easy para conseguir las últimas cosas como para tenerlo listo y usable. Lo más importante fue un espejo (baño sin espejo no es baño) y un chirimbolo para colgar el papel higiénico. Mr. Dorima colocó todo ayer y hoy limpié todo a conciencia. Solo faltan algunos detalles mínimos para que esté finalmente despejado. :)

 El título del blog va por algo que nos sucedió cuando volvíamos de Easy: Ya dentro del edificio nos dimos cuenta que el gato del vecino había vuelto a escaparse. Ni falta hace decir que bien abrí la puerta de mi departamento el gato se metió como pancho por su casa...
Siendo que yo estaba MUY cansada (estuvimos años parados en Easy) Mr. Dorima se ofreció a devolver el gato. Y, son dos pisos por escalera, vio?
Una vez en planta baja, Mr. Dorima tocó timbre y devolvió el gato... Y vio que no es una, sino que son dos señoras las que viven en el departamento de los gatos, y que de tan parecidas solo pueden ser hermanas. Cabe destacar que hacía tiempo que yo venía sin entender nada, ya que yo pensaba que era una sola señora la que vivía en el departamento, y tenía comportamientos algo contradictorios.
En términos de que a veces la veía y me saludaba, mientras que otras veces no era capaz de sostenerme la puerta si me veía que estaba por salir o entrar. Así que no se trata de una señora esquizofrénica, sino dos: una amable y otra... nada que ver.
Lo curioso de estas señoras no fue tanto verlas juntas, sino que al ir a devolverles el gato Mr. Dorima comentó algo de que al gato le debe gustar mucho nuestra casa. ¿La respuesta? Que si no lo queríamos.  Que en serio.

O_o

La realidad es que la tentación fue grande. Tanto a Mr. Dorima como a mí nos gustan los gatos y desde que estuvo aquella tarde conmigo, tengo ciertas ganitas...
Pero después pienso en que al heredero mucho no le van las mascotas, que el sillón es nuevo y en lo cómodos que estamos así... Por último pienso en el minino, que está medicado (nunca supe de qué) y que le debe hinchar las pelotas compartir la casa con otros tres gatos y por eso se escapa.
¿La pura verdad? Me jode esto de pensarlo y pensarlo y no poder decidirme.

Así que solo me resta desearles a todos (los niños) un feliz Día del Niño. En especial al mío, vio?


Niño con su botín: remera de Mario Bros + Mario Kart 7